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10 canciones inspiradas en viajes inolvidables

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Los imanes de mi nevera

Route 66 de Los Rolling Stones, Berlín de Coque Malla o Castle on the hill de Ed Sheeran protagonizan esta lista de canciones inspiradas en viajes inolvidables. No olvides añadirlas a la playlist y viajar con cada una de ellas.

Las canciones son capaces de transportar a lugares nunca visitados. Siguiendo el ritmo y atendiendo a sus letras es posible adentrarse en ciudades, descubrir sus costumbres, sus sabores y el quehacer de quienes las viven cada día. Muchas de ellas nacen de experiencias reales y vivencias que cobran forma de melodía. Son creadas por los artistas que, en un viaje único, aprenden, lloran, ríen o simplemente quedan impresionados por un destino. Algunas de estas canciones inspiradas en viajes inolvidables resuenan entre estas líneas.

Bachata de Futuoka de Juan Luis Guerra

Bachata en Fukuoka es una canción de Juan Luis Guerra y está basada en el viaje que el cantante hizo a Fukuoka, en Japón, donde ofreció un concierto. El artista quedó impresionado por cómo los locales sabían cantar y bailar bachata, merengue y mambo.

Esta canción, que forma parte de su álbum A son de Guerra, fue escrita en la misma ciudad durante su estancia. Futuoka se sitúa en el extremo norte de la isla Kyushu del país nipón y es muy popular gracias a sus impresionantes templos que combinan con playas y modernos centros comerciales.

Route 66 de los Rolling Stones

Aunque fue escrita por el músico y compositor Bobby Troup, esta canción es una de las canciones míticas inspiradas en viajes más famosas de la banda liderada por Mick Jagger. Inspirada en la Ruta 66, fue grabada por primera vez por Nat King Cole a finales de los 80 y es un claro homenaje a una de los recorridos más importantes por las carreteras estadounidenses.

La Ruta 66 abarca más de 4000 kilómetros de extensión y pasa por lugares tan increíbles como Chicago, Oklahoma, Misuri, Texas o Las Vegas.

Berlín de Coque Malla

Damos un salto de EE.UU a una ciudad inmersa en historia y llena de encanto, Berlín. El que fuera líder de la banda Los Ronaldos rememora, a través de una historia entrañable y melancólica, sus viajes a la capital alemana. Tal y como dice en una de sus entrevistas, Madrid sigue siendo su epicentro para vivir, pero «Berlín es una ciudad muy inspiradora y agradable», aunque asegura que prefiere «visitarla por placer».

Este tema, que interpreta en su disco La hora de los gigantes y versiona junto a Leonor Watling, es uno de sus preferidos. La canción transporta a las calles berlinesas, una ciudad con más de 3 millones de habitantes reconocida por e Monumento del Holocausto y los restos del Muro de Berlín y sus grafitis.

Our last summer de ABBA

La banda sueca tiene un sinfín de hits y, entre ellos, esta balada de los años 80 que rememora un viaje en París. Our last Summer fue escrita por Björn y Benny y es uno de los temas del disco Super Truper. Cuentan que Björn la escribió recordando un viejo amor en Francia y los viajes que realizaban.

La canción forma parte actualmente del musical Mamma Mia!, basado en las canciones de ABBA.

Vine del norte de Ismael Serrano

La canción, que se incluye en el álbum La memoria de los peces de 1998, cuenta una bonita historia de amor de cuando el cantante madrileño viajó a Santiago de Chile buscando “una canción y una cruz” y se cruzó con una universitaria chilena.

Santiago de Chile es una metrópoli llena de historia, de poesía, colores vivos y una gastronomía maravillosa para los amantes del buen comer. La Plaza de Armas, en el centro antiguo de la ciudad, reúne monumentos como el Palacio de la Real Audiencia, donde está el Museo Histórico Nacional, y la Catedral Metropolitana del siglo XVIII. También destaca el Palacio de la Moneda, que Serrano cita en la canción, o la Avenida Libertador General Bernardo O’Higgins, más conocida como Alameda. Una esencia que el cantautor resume en algunas de sus estrofas:

«Al tiempo llegué a mi norte, con una canción y una cruz,
Con la estela de un cometa, con tu mentira y con tu luz.
En Madrid seguía lloviendo, tal y como lo dejé,
Y en Santiago tantas cosas, hoy me muero por volver».

Castle on the Hill de Ed Sheeran

Aunque este es, más bien, un viaje por los recuerdos, Ed Sheeran viaja a través de la melodía a su ciudad de la infancia. El cantante recuerda las historias que vivió en Framlingham, en el condado de Suffolk en el Reino Unido, durante su adolescencia.

Sheeran menciona el castillo de Framlingham, un monumento normando que bien merece una visita. De hecho, en el año 2017 el artista británico fue invitado a actuar en él.

Chicago de Christina Rosenvinge & Vetusta Morla

Puede que Christina Rosenvinge y los miembros de Vetusta moral no hicieran este viaje juntos pero sin duda hay huellas de experiencia en esta canción. El tema, original de Sufjan Stevens, se creó y versionó con motivo del Día de la Música. Una espectacular adaptación para homenajear este día que Stevens incluyó en su disco Illinois. Este forma parte de su ambicioso proyecto de 50 álbumes con temática de cada uno de los estados de EE.UU.

Bixby Canyon Bridge de Death Cab for Cutie

Se trata de una canción de la banda estadounidense Death Cab for Cutie que recibe su nombre del popular puente situado en California y visitado por miles de personas cada año. El líder de grupo, Ben Gibbard, escribió este tema inspirándose en un libro de Kerouac llamado Big Sur y en las sensaciones que él mismo tuvo la primera vez que estuvo allí. 

Una de las canciones inspiradas en viajes inolvidables que da un toque diferente a este decálogo de temas únicos. El famoso puente protagonista está a 190 km al sur de San Francisco y destaca por su maravillosa arquitectura. 

La vuelta al mundo de Calle 13

Con el sello de muchos, muchos viajes. La banda puertorriqueña lanzó este sencillo en el año 2012 no sólo para recordar muchas experiencias viajando y de su importancia (Residente y Eduardo Cabra lo sabían de buena tinta tras rodar por el mundo con sus giras de conciertos). El tema también ahonda en «ese momento preciso en el que uno decide darle un giro a la vida para cambiar su rumbo».

La canción está inspirada en la película Into the wild, dirigida por el actor estadounidense Sean Penn. En ella se cuenta una historia real sobre el joven Christopher McCandless que, siguiendo su espíritu aventurero y su amor por la naturaleza, decidió llevar un estilo de vida bohemio. Finalmente, debido a la climatología y su poca preparación o formación para vivir en ese entorno, falleció a los 24 años. 

Copenhague de Vestusta Morla

Más allá de que la ciudad danesa sea considerada en diversos rankings como la urbe más feliz del mundo, Vestusta Morla rememora su viaje a Copenhague a través de historia de amor y desamor, con tintes melancólicos. Una historia con los canales como escenario que también evoca ese vacío que se siente a veces en los trenes y aeropuertos y alude a los momentos vividos en ellos.

Copenhague, capital del país, destaca por muchas cosas, entre ellas sus calles adoquinadas, palacios, puentes y espacios verdes, siendo cuna del diseño y de la sostenibilidad.

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